17 de noviembre de 2010

La Virgen de Lagunas


Erase una vez un pastor que como todos los días iba a una fuente a unos siete kilómetros de Cariñena para saciar la sed de sus ovejas. Aunque sus ovejas estaban sedientas estas no bebieron ni una gota de agua. De una piedra cercana salió resplandor, cuando se acerco pudo distinguir la silueta de la Virgen María. Esta le dijo que fuera al pueblo y les contara lo ocurrido, dicho esto sonarían las campanas de la iglesia sin que nadie las voltease, luego construirían una ermita en este lugar con el nombre de La Virgen de las Lagunas. Asi sucedió y unos días después la ermita comenzó a coger forma.



1 comentario:

filipus dijo...

Las leyendas envuelven misteriosamente el tiempo, conferiendolé un aura mágica, sentimental y que nos devuelve una mirada idílica de un pasado no vivido. Pero no por ello dejan de ser hermosas, siempre me he preguntado, por que en esta leyenda del santuario de la virgen de las lagunas, las ovejas no quieren beber agua, pues según la doctrina de la iglesia estos animales no tienen alma, ni discernimiento, pero deciden no beber.

Un saludo de uno de Cariñena.
Ánimo.