En el escudo de la localidad de Maella, aparece una mano femenina, que alude a la siguiente leyenda, originada en el siglo XV.
El conde y señor de Maella abusaba de su poder. La población, harta de los abusos del señor feudal, organizó una revuelta pero este levantamiento fracasó. El conde mandó detener, encerrar y ajusticiar al cabecilla de la revuelta.
Ante esta situación, la novia del joven preso, decidió acudir ante el conde para suplicarle la liberación de su amado. El señor se enamoró de la hermosura de la joven y para aprovecharse de aquella oportunidad, le dijo que liberaría a su amado, siempre y cuando ella le entregara su mano.
La joven, sin dudarlo ni un instante, aceptó la propuesta, así que fue a su casa, y con una decisión admirable, se cortó la mano y se la envió al conde en una bandeja de plata.
El conde al verla exclamó: ¡La mano de ella! Sorprendido decidió cumplir su promesa y liberar al joven mozo.
En aquel dialecto Má d'ella, significa "mano de ella" y ha dado lugar al nombre actual de este pueblo, Maella.
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